(FOTOS LA PRENSA/J. MORALES)
Manuel Salgado, director del Programa Emprendedores de la UAM
El financiamiento es uno de los principales pegones para el desarrollo de las Pequeñas y Medianas Empresas (Pyme), aunque para superar esa barrera es necesario que estas unidades empresariales enderecen áreas sensibles como la contabilidad, planes de negocios, estrategias de mercado e incluso su relevo gerencial. Manuel Salgado, director del Programa Emprendedores de la UAM, habla sobre un proyecto al que pueden aplicar las Pyme y superar tales barreras |
Mario José Moncada
La Universidad Americana (UAM) es la encargada en Nicaragua de ejecutar un programa impulsado en la región por la Corporación Interamericana de Inversiones, del Grupo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que apuesta a fomentar el crecimiento de las Pequeñas y Medianas Empresas (Pyme), en especial de aquéllas que tengan un sesgo exportador.
El programa incluye la realización de un diagnóstico integral de las Pyme, la ejecución de un plan para superar las debilidades que se encuentren en las mismas y la consecución del financiamiento necesario.
Hasta hoy a nivel nacional 20 pyme han sido escogidas para ser beneficiadas con el programa llamado Financiación Innvovadora de Pyme (Finpyme). Actualmente el proceso está abierto para escoger en el país a 10 pyme más.
“Con este programa lo que queremos es posibilitar el crecimiento de las pyme beneficiadas, lo cual va a permitir que sus productos sean más competitivos en los mercados internacionales y que, en consecuencia, aumenten las exportaciones y el crecimiento económico de Nicaragua”, sostiene Manuel Salgado, director del Programa Emprendedores de la UAM.
¿De qué se trata el programa Finpyme?
La Corporación Interamericana de Inversiones, del BID, es una de las instituciones de apoyo a las Pequeñas y Medianas Empresas (Pyme). En aras de esto llevó experimento en dos países de América del Sur, como son una economía rica como Chile y una pobre como es Bolivia, y puso en práctica un proyecto que se llama Finpyme. Significa Financiamiento Innovador para Pequeñas y Medianas Empresas. En estos países del Cono Sur el proyecto fue extremadamente exitoso y en aras de eso la Corporación Interamericana de Inversiones lleva adelante este proyecto en países de Centroamérica, más Panamá y República Dominicana. Estamos hablando de siete países donde se lleva adelante Finpyme.
La gerencia de Finpyme busca a universidades de prestigio en estos siete países para que sean los agentes locales del proyecto. En el caso de Nicaragua selecciona al Programa Emprendedores de la UAM para que sea el agente local. Básicamente el Finpyme tiene tres componentes, entre ellos la realización de diagnósticos a las pequeñas y medianas empresas, a aquéllas que sus ventas anuales sean de 150 mil dólares, luego que tengan un tejido empresarial bastante consistente y luego que tengan un sesgo exportador o potencialmente exportador.
Vale decir que las empresas que aplican al programa no son empresas o proyectos emprendedores que van a iniciarse, sino empresas que tengan al menos tres años de haber estado instauradas en el mercado, de estar funcionando, y el parámetro de 150 mil de ventas habla que no se trata de microempresas, para las cuales el BID tiene otros programas que ayudan o fomentan su desarrollo, como es el caso del Fomin, que son proyectos directamente estructurados para proyectos de microempresas de la región latinoamericana.
El lanzamiento oficial del proyecto se realizó en el año 2006. De ahí vinieron varias empresas que aplicaron al programa, pero en ese particular fue Corporación Interamericana de Inversiones la que escogió a las primeras empresas que aplicaban a Finpyme.
El equipo de la UAM está constituido por docentes de la Facultad de Administración de Empresas, así como de estudiantes que en determinado momento requieren realizar una pasantía y quieren aprender a hacer diagnósticos empresariales, de forma que de la mano con sus docentes, nos abocamos a hacer los diagnósticos empresariales.
¿Pero retomemos los componentes del programa, que incluye el mismo?
El primer componente es un diagnóstico empresarial que consiste en evaluar a la empresa en todos sus componentes, vale decir en términos de su planificación estratégica, es decir si la empresa cuenta con misión, visión, con valores, si cuenta con estrategia de mercadotecnia, que en determinado momento le sea posible dinamizar sus ventas, si la empresa es manufacturera y si cuenta con estadísticas de su producción, de forma que sepa cuáles son sus costos totales, unitarios, el precio de venta determinado de su producto para el consumidor. También la parte de contabilidad y finanzas, en fin todos estos componentes son los que se dignostican a las empresas. El costo de este diagnóstico es completamente gratuito, de forma que es una cuantificación de la salud de la empresa para ver cuáles son debilidades en las que habría que hacer un primer esfuerzo para mejorar su salud en términos de un plan de mejora competitiva y su posterior financiamiento, que son los otros componentes.
¿En esta primera etapa del programa cómo les ha ido, cuántas empresas han seleccionado?
A la fecha hemos realizado 20 diagnósticos empresariales. Encontramos que en el universo de empresas dignosticadas hay unas que en determinado momento tienen mayor nivel de fortalecimiento, otras en un nivel medio y otras en un nivel menor. Tuvimos el año pasado, en octubre, la primera cumbre Finpyme, que se realizó en El Salvador, fue muy admirable y grato que El Salvador y Nicaragua fueron los países que habían realizado mayor cantidad de diagnósticos empresariales, eso en buena medida creo obedece al importante esfuerzo que realizamos acá, los otros países tenían una menor cantidad de diagnóstico. Ahora en febrero tuvimos la segunda cumbre Finpyme en República Dominicana e hicimos un análisis de lo que habíamos estructurado en términos de diagnósticos y también seguimos punteando Nicaragua y El Salvador, y se enfatizó en el elemento de la mejora competitiva, es decir en la asistencia técnica.
¿Y en estos resultados qué tan importante resulta el financiamiento?
Tanto el BID como los equipos locales que colaboramos en el proyecto estamos plenamente conscientes que el financiamiento si bien es importante, no se puede otorgar si la empresa en un determinado momento presenta flaquezas que no permiten superar tales obstáculos. Entonces, en esta segunda cumbre se estipuló que venía un segundo componente que era el de la asistencia técnica, de forma que expertos nacionales o internacionales, si el caso lo requería, iban a fortalecer a las empresas en aquellas áreas débiles, a través del diagnóstico empresarial que se habían encontrado y que se deben superar.
En el caso del primer taller Finpyme en El Salvador se seleccionaron a bancos de la región para apoyar en la parte financiera. En el caso de Nicaragua fue el Banco de Finanzas el seleccionado para proporcionar los recursos a las empresas. Fundamentalmente se ha enfatizado, y comparto ese criterio, que si no se tiene un nivel de venta satisfactorio, costos que en un determinado momento sean óptimos y la rentabilidad de la empresa sea satisfactoria, si no se llevan en un momento determinado cifras contables y financieras, que nos den información clara y fidedigna sobre la situación de la empresa, creo que apostar a recursos financieros no sería adecuado.
O sea el BID, muy responsablemente, así como las universidades que estamos participando en los diagnósticos empresariales, estamos muy conscientes que el financiamiento es una herramienta para el crecimiento de las firmas, siempre y cuando la salud de las empresas sea la óptima. Hay que monitorear la salud de las empresas.
¿Ahora hacia dónde va el programa, cuáles son sus planes?
Fuimos de los países que inicialmente teníamos (como meta) realizar diagnósticos de 40 pymes, pero dado nuestro proceso de aceleración en cuanto a dichos diagnósticos, se nos disminuyó la cuota a 30 durante la cumbre realizada en República Dominicana, porque es apremiante el hecho de entrar a una segunda etapa que es el fortalecimiento de las empresas que ya fueron seleccionadas. Ahorita queda un trecho de hacer 10 diagnósticos nacionales, para cumplir con la meta que se redefinió en República Dominicana y entrar en una segunda etapa de planes de mejoras competitivas para las empresas que fueron diagnosticadas inicialmente.
¿Qué tipo de empresas diagnosticaron en la primera etapa?
Tenemos empresas de la rama industrial, de la rama comercial, de la panificación, también con cobertura a lo largo y ancho del país. Tenemos empresas de Managua, Granada, Masaya, León, Chontales, por ejemplo.
Menciona el elemento de que muchas empresas deben tener sesgo exportador ¿por qué esa condición?
Aunque no es una exigencia ciento por ciento, pero de preferencia sí, con base en que las pequeñas y medianas empresas nicaragüenses son las que están en condiciones de colocar nuestros bienes y servicios en el exterior. De forma tal que estas empresas para llenar el volumen de ventas que exige el programa, están teniendo ventajas competitivas con el resto del mundo, exportan a países centroamericanos, otras al Caribe como República Dominicana. Son empresas que en algunos casos han copado el mercado nacional y tienen un sesgo exportador dado que son pequeñas y medianas empresas y no microempresas que se caracterizan por abastecer el mercado departamental o regional y tienen que dar un salto muy importante en términos de excedentes económicos que le permitan pasar a pequeñas empresas y exportar.
¿Retomando los resultados de los diagnósticos, qué elementos importantes han encontrado?
Creo que el común denominador que ha imperado en estas empresas es que muchas tienen un sesgo familiar, al tener eso prácticamente se quiere superar ese tipo de esquema para que sean mas autónomas en términos de hacer una planificación estratégica que permita a las diferentes áreas de la empresa trabajar de una manera más coherente, teniendo metas a corto, mediano y largo plazo. Eso se busca cuando fundamentalmente una empresa a través de su planificación estratégica tiene objetivos, misión, valores y de esa forma se tiene un horizonte hacia dónde quiere llevar la empresa y se definen metas en términos de producción de esta empresa, por ejemplo. Esto se va respetando a nivel de cada área y esto posibilita una interacción bien fluida y bien estable entre las diferentes áreas de una empresa.
Pero cuando se tiene un poco el sesgo familiar hay que superar ese tipo de esquemas, porque también es importante el relevo generacional, porque si esta empresa hoy está siendo administrada por una primera o segunda generación, a la vuelta de diez años o quince años se requiere el relevo generacional. Básicamente este empresario es un poco conservador en términos de sus esquemas de mando y esa forma estática de ser es un freno que imposibilita un poco tomar decisiones más autónomas, tener profesionales calificados en cada una de sus áreas para que la empresa se aparte un poco del escenario del sello familiar, supere este tipo de “deficiencia” y de esa forma se tenga y una estructura más empresarial.
También encontramos debilidades relativas a la contabilidad y finanzas. Si bien un alto porcentaje de las pequeñas empresas diagnosticadas lleva bien sus estructuras contables y financieras, es importante también que otras deben mejorar sus registros contables y posibilite decisiones. En estos elementos vamos a trabajar de manera fuerte.
¿El próximo proceso de seleccionar a las 10 nuevas pymes cuándo empieza?Aprovecho este foro para que las empresas apliquen, se pongan en contacto con este servidor al correo manuel.salgado@uam.edu.ni porque tenemos cancha para diez empresas adicionales y a costo cero tener un diagnóstico empresarial, un plan de mejora competitiva y luego recursos financieros.
EL EFECTO DOMINÓ En Nicaragua las Pequeñas y Medianas Empresas (Pyme) constituyen más del 80 por ciento de las unidades empresariales. Manuel Salgado, director del Programa Emprendedores de la UAM, sostiene que por ello es importante darles un “empujón” para fomentar su crecimiento, ya que con ello también contribuirán al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB). Salgado apuesta a que el programa Finpyme “va a posibilitar el crecimiento” de las pymes que beneficie, “lo cual va a permitir que sus productos sean más competitivos en los mercados internacionales y de cara a los Tratados de Libre Comercio (TLC) que Nicaragua tiene en vigencia (como el DR-Cafta) y otros por venir como el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea (UE), que incluye un TLC y que actualmente se negocia. A su juicio, el crecimiento de las pymes “va a dinamizar las exportaciones con el efecto de generación de empleos y crecimiento sostenido del nivel de actividad económica del país”. El académico de la UAM subrayó que las empresas que apliquen al Finpyme deben asumir el compromiso de colaborar con los consultores del programa, quienes se han comprometido a guardar la debida confidencialidad sobre los diagnósticos que resulten de cada empresa y la información que las mismas brinden. “El crecimiento empresarial y el financiamiento son elementos que van de la mano, no se pueden divorciar. Las unidades económicas llamadas pequeñas y medianas empresas, a las cuales se canalice el crédito, deben estar en condiciones de administrarlo de manera eficiente”, sostiene Salgado. Dije que por ello es importante que las Pyme tengan planes integrales de desarrollo, incluyendo metas claras. “De nada serviría estar aumentando el crédito a las Pyme si no tienen una estructura productiva que posibilite pagar en tiempo y forma estos créditos”, añade Salgado. |
Tomado del diario La Prensa, Managua, Nicaragua. Sección: Economia. Miercoles 16 de Abril del 2008. |
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