No importa que sea otoño, la ciudad de San Francisco disfruta de un esplendido día. El sol es nuestro aliado y nos arrulla con su tibieza. El verdor de los abundantes parques y jardines que adornan las calles y avenidas de la cuna de los hippies, se percibe más intenso gracias a la visita del astro rey. El teléfono repica. --¡Oye Managua, buenas tardes!- contesta en la barra, un señor de pelo cano y amplia calva. Tal saludo no deja de sorprendernos, pero inmediatamente recapacitamos. ¡Claro! Aunque estamos en California, nos encontramos en un pedacito de Nicaragua: el restaurante “Oye Managua”, donde disfrutamos de la comida y antojos nicaragüenses que aquí se ofrecen. El chancho con yuca, indio viejo, tajadas con queso, buñuelos y otros platillos, se ven pasar hacia las mesas de compatriotas y hermanos de Latinoamérica que visitan el lugar. Don Enrique Baca, el dueño del local, cuelga el teléfono y regresa a nuestra mesa para seguirnos contando la historia del restaurante, que es parte de la historia de su vida.
La verdadera dueña de este local es mi esposa, María Elena Noguera, de Granada. Ella tiene una cuchara excelente y sus recetas son las que han contribuido al éxito de nuestro restaurante, nos confiesa orgulloso, este leonés de 77 años, y casi 60 de vivir en California.
El restaurante tiene tres años de fundado, pero antes fuimos los dueños del Red Baloon, donde también vendíamos comida nicaragüense. Lo tuvimos durante 24 años y lo vendimos para volver a Nicaragua, pero la cosa no funcionó; los nietos nos hacían mucha falta y decidimos volver.
La inspiración y los recuerdos se van mezclando con los aromas culinarios... Alguien solicita un nuevo servicio y don Enrique tiene que dejarnos una vez más. Al ser un restaurante pequeño, él mismo y un ayudante atienden las diez o doce mesas del local. El ir y venir es la tónica del negocio, y el veterano empresario de la cocina nacional nos pide disculpas cada vez y cuando. Mientras esperamos su regreso, mi hija Soraya me cuenta detalles de la ciudad y del propio restaurante, del cual ella es cliente frecuente.
En eso estábamos, cuando notamos que uno de los comensales que suponemos es nicaragüense, se prepara para abandonar el local. Decido hablar con él para conocer su opinión del local. Lo abordo y me confirma que, efectivamente, es nicaragüense, y que se llama Francisco Velásquez. Es nacido en La Concepción, departamento de Masaya, y tiene 22 años de vivir en Estados Unidos. Este coterráneo está acompañado de su familia, y asegura que cada vez que desea disfrutar la comida de nuestra tierra, viaja desde una ciudad llamada San Bruno, distante unos veinte kilómetros de San Francisco, hasta el “Oye Managua”.
Según conocimos, el restaurante tiene un enfoque familiar, y de viernes a domingo tiene un pianista guatemalteco. A don Enrique no le gustan las palabras groseras, y las pocas veces que un cliente se ha extralimitado, le ha llamado la atención. También descubrimos que los sábados por la mañana abre especialmente para que sesione una capítulo de la Fraternidad de Hombres de Negocios.
Nuestro entrevistado ha regresado. Hay que aprovechar el tiempo al máximo, pues las circunstancias nos obligan a imprimirle un sentido de velocidad a nuestra una entrevista. Le pregunto:
¿Quién cocina en este restaurante?
Doña Chilo, una excelente cocinera de Granada. Ella tiene 22 años conmigo. Ramón el mesero y la ayudante de cocina, también son de Granada. Somos cuatro en total.
¿Tuvo algún problema para hacer nuevamente clientela?
No hombre. Desde el primer día que abrimos fue un éxito. La gente sabe que ésta es la mejor comida nicaragüense que se vende en San Francisco. Y la de mejores precios. Que me perdonen los otros colegas, pero es la verdad.
¿Cuál es el nicaragüense más famoso que ha comido en su restaurante?
El que hizo la canción “La almohada”, que cantaba José José: Adán Torres.
Varios artistas nicaragüenses podrían leer esta entrevista. ¿Si alguno quisiera promocionar su música u otra expresión artística, ¿le daría oportunidad en su restaurante?
Siempre. Todos son bienvenidos. Debo añadir algo muy importante: que mi esposa y yo tenemos por principio… mi padre también me lo enseñó (sus ojos se ponen llorosos): “la limosna no se tira, se besa y se da en la mano”. Desde que estamos en este negocio todo aquel que viene llegando a este país y nos pide de comer, siempre obtiene la comida que solicita.
¿Cuál es la dirección y el teléfono de Oye Managua?
Oye Managua está ubicado en una calle muy famosa en San Francisco, la “Mission”. Estamos entre la Mission y la 30 Avenida. Nuestro teléfono es el 415-8212702
Me quedé con una inquietud: ¿cómo se casó un leonés con una granadina?
Los polos opuestos se atraen (risas).
¡Sorpresa! Al obsequiarme su tarjeta de presentación, veo que trabaja como asesor de modas. Muy orgulloso me comenta que desde hace muchos años, trabaja asesorando a ejecutivos de la ciudad en su forma de vestir. “Yo a usted lo puedo poner dejar como un modelo”, me dice muy seguro.
Su nombre es Mike Galo, nacido en la ciudad de Managua en las cercanías del antiguo Instituto Ramírez Goyena. Nos relató algunas de sus victorias tanto en el campo aficionado como el profesional a finales de los años cincuenta. Se retiró del boxeo por solicitud de su esposa. Nos dijo que era amigo de Alexis Argüello, y comentó que cuando éste venia a California se hospedaba en su casa. “Somos grandes amigos. No hablamos de política”, aclaró.
Tomado de El Nuevo Diario, Managua, Nicaragua.
Sección: Emprendedores
Domingo 26 de Octubre del 2008.
La verdadera dueña de este local es mi esposa, María Elena Noguera, de Granada. Ella tiene una cuchara excelente y sus recetas son las que han contribuido al éxito de nuestro restaurante, nos confiesa orgulloso, este leonés de 77 años, y casi 60 de vivir en California.
El restaurante tiene tres años de fundado, pero antes fuimos los dueños del Red Baloon, donde también vendíamos comida nicaragüense. Lo tuvimos durante 24 años y lo vendimos para volver a Nicaragua, pero la cosa no funcionó; los nietos nos hacían mucha falta y decidimos volver.
La inspiración y los recuerdos se van mezclando con los aromas culinarios... Alguien solicita un nuevo servicio y don Enrique tiene que dejarnos una vez más. Al ser un restaurante pequeño, él mismo y un ayudante atienden las diez o doce mesas del local. El ir y venir es la tónica del negocio, y el veterano empresario de la cocina nacional nos pide disculpas cada vez y cuando. Mientras esperamos su regreso, mi hija Soraya me cuenta detalles de la ciudad y del propio restaurante, del cual ella es cliente frecuente.
En eso estábamos, cuando notamos que uno de los comensales que suponemos es nicaragüense, se prepara para abandonar el local. Decido hablar con él para conocer su opinión del local. Lo abordo y me confirma que, efectivamente, es nicaragüense, y que se llama Francisco Velásquez. Es nacido en La Concepción, departamento de Masaya, y tiene 22 años de vivir en Estados Unidos. Este coterráneo está acompañado de su familia, y asegura que cada vez que desea disfrutar la comida de nuestra tierra, viaja desde una ciudad llamada San Bruno, distante unos veinte kilómetros de San Francisco, hasta el “Oye Managua”.
Vale la pena venir hasta aquí, comenta satisfecho.
La mejor comida nicaragüense de San FranciscoSegún conocimos, el restaurante tiene un enfoque familiar, y de viernes a domingo tiene un pianista guatemalteco. A don Enrique no le gustan las palabras groseras, y las pocas veces que un cliente se ha extralimitado, le ha llamado la atención. También descubrimos que los sábados por la mañana abre especialmente para que sesione una capítulo de la Fraternidad de Hombres de Negocios.
Nuestro entrevistado ha regresado. Hay que aprovechar el tiempo al máximo, pues las circunstancias nos obligan a imprimirle un sentido de velocidad a nuestra una entrevista. Le pregunto:
¿Quién cocina en este restaurante?
Doña Chilo, una excelente cocinera de Granada. Ella tiene 22 años conmigo. Ramón el mesero y la ayudante de cocina, también son de Granada. Somos cuatro en total.
¿Tuvo algún problema para hacer nuevamente clientela?
No hombre. Desde el primer día que abrimos fue un éxito. La gente sabe que ésta es la mejor comida nicaragüense que se vende en San Francisco. Y la de mejores precios. Que me perdonen los otros colegas, pero es la verdad.
¿Cuál es el nicaragüense más famoso que ha comido en su restaurante?
El que hizo la canción “La almohada”, que cantaba José José: Adán Torres.
Varios artistas nicaragüenses podrían leer esta entrevista. ¿Si alguno quisiera promocionar su música u otra expresión artística, ¿le daría oportunidad en su restaurante?
Siempre. Todos son bienvenidos. Debo añadir algo muy importante: que mi esposa y yo tenemos por principio… mi padre también me lo enseñó (sus ojos se ponen llorosos): “la limosna no se tira, se besa y se da en la mano”. Desde que estamos en este negocio todo aquel que viene llegando a este país y nos pide de comer, siempre obtiene la comida que solicita.
¿Cuál es la dirección y el teléfono de Oye Managua?
Oye Managua está ubicado en una calle muy famosa en San Francisco, la “Mission”. Estamos entre la Mission y la 30 Avenida. Nuestro teléfono es el 415-8212702
Me quedé con una inquietud: ¿cómo se casó un leonés con una granadina?
Los polos opuestos se atraen (risas).
Un campeón de boxeo, que trabaja como asesor de modas
Mientras degustábamos una sabrosa costilla de cerdo con un exquisito churrasco y el ambiente era animado por una alegre guaracha, un elegante caballero de traje y corbata entró como Pedro por su casa, bailando con ánimo y buen ritmo. En ese mismo instante don Enrique salió de la cocina, y tomándolo del brazo se dirigió a nuestra mesa y nos dijo: “Éste es un personaje de la ciudad de San Francisco. Un gran boxeador. Noqueó al campeón de California, en el primer round. Aquí se los dejo para que les cuente más cosas del restaurante, él me apoya en las relaciones públicas del restaurante”.¡Sorpresa! Al obsequiarme su tarjeta de presentación, veo que trabaja como asesor de modas. Muy orgulloso me comenta que desde hace muchos años, trabaja asesorando a ejecutivos de la ciudad en su forma de vestir. “Yo a usted lo puedo poner dejar como un modelo”, me dice muy seguro.
Su nombre es Mike Galo, nacido en la ciudad de Managua en las cercanías del antiguo Instituto Ramírez Goyena. Nos relató algunas de sus victorias tanto en el campo aficionado como el profesional a finales de los años cincuenta. Se retiró del boxeo por solicitud de su esposa. Nos dijo que era amigo de Alexis Argüello, y comentó que cuando éste venia a California se hospedaba en su casa. “Somos grandes amigos. No hablamos de política”, aclaró.
Sección: Emprendedores
Domingo 26 de Octubre del 2008.