viernes, 24 de marzo de 2017

De empleados a empresarios

Los deseos de independizarse laboralmente fueron más grandes que el miedo a fracasar. Conozca la historia de Talú.   


Por: Dora González   


Tener un negocio era una idea que siempre caló en el pensamiento de Luis Marín, pero no tenía claro en qué, dónde y cuándo podía iniciarlo. Siempre soñó con independizarse, aún cuando tenía un puesto de trabajo estable.

Hace tres años se casó con Tania Reyes, quien tiene familiares en Honduras, y cada vez que ellos viajaban a Nicaragua buscaban productos utilitarios con identidad nacional: esa fue la primera pista que despertó el interés de Marín, vio la oportunidad de invertir en productos elaborados a base de cuero de reses. Un año después junto con su esposa, quien también laboraba en la misma empresa, tomaron la decisión de renunciar e iniciar su proyecto de elaborar productos de cuero.

“Tenés que cambiar el esquema de tener un salario fijo a hacer tu propio salario. Es un reto que uno pasa como emprendedor, pasás de un esquema a otro, un cambio de proceso que es muy duro, hay momentos en que querés desistir”, señala Marín.    

A pesar de que en un inicio no tenían conocimiento del proceso de elaboración de productos a base de cuero, buscaron ayuda e hicieron una alianza estratégica con un artesano de Granada y a medida que pasaba el tiempo iban aprendiendo uno del otro, desde la elaboración, diseño y detalles de la pieza hasta la administración del dinero para lograr sobrevivir en el intento de la independencia laboral.     

         


Los primeros compradores de sus productos fueron sus amistades, quienes daban recomendaciones en qué podían mejorar y poco a poco se fueron dando cuenta de qué productos tenían mayor aceptación. La demanda fue buena, entonces continuaron el proceso de establecimiento de la marca y fue ahí donde empezaron a formalizar su empresa, hace dos años. Marín asegura que uno de los obstáculos que enfrentó fue el proceso de formalizar el negocio y registrar la marca Talú, que significa Tania y Luis.   

“Desde un inicio quisimos que nuestro negocio se formara bajo la legalidad, pero en ese proceso nos dimos cuenta que es bastante burocrático y a pesar de eso seguimos hasta el final, ya nuestro nombre lo tenemos inscrito en (el Registro de) la Propiedad Intelectual”, dijo Marín.

Además de cada uno de los requisitos legales, otro aspecto fundamental que han tenido que cuidar desde un inicio es la presentación de los productos, pues está claro que existen muchos artesanos y pequeños empresarios que se dedican a fabricar la misma línea de accesorios, pero asegura que la combinación de estética y calidad en sus productos ha sido clave para tener aceptación en el mercado. Su esposa supervisa los diseños.

“A través de la marca lo que garantizamos es calidad al producto, damos un tiempo de garantía para que la gente se sienta segura, es un producto que el cliente lo exige pero eso solo te lo da un diseño innovador y versátil”, explica Marín.  

   


Las piezas pioneras en Talú fueron los bolsos, billeteras y fajas. Pero han ampliado su oferta a llaveros, souvenirs, protectores de computadoras, celulares y tablets.    

La materia prima la adquieren en tenerías locales, los otros productos complementarios son importados de países centroamericanos. Y a medida que va creciendo la demanda a ese mismo ritmo va la inversión en maquinarias para la elaboración de productos.  


Trabajan para crecer en el exterior      

El crecimiento de esta pequeña empresa que emplea a cinco personas de forma permanente es constante.

En las metas a mediano plazo de Talú está posicionarse en el mercado interno como una marca líder y conquistar el mercado europeo.

Hasta la fecha sus productos han sido exportados a Costa Rica y Honduras, pero a pequeña escala. 

   



Contacto       

Talú se ubica en el centro comercial Multicentro Las Brisas, en Managua.
Correo electrónico: luis.marin@talucreaciones.com
Teléfono: 8888-0888
Facebook: www.facebook.com/talu.tl  

     


Tomado del diario digital, www.laprensa.com.ni , Managua, Nicaragua.
Sección: Economía.  
Viernes 24 de Marzo del 2017.    

martes, 21 de marzo de 2017

“Vimos potencial y facilidades para desarrollar nuestros negocios”

EMPRENDEDORES. OrgaNica es la última marca de productos cosméticos desarrollada a partir del reciclaje de aceites, luego de incursionar con éxito en restaurante, panadería, hielo y servicio de catering. 

Fernando González, emprendedor y propietario de la marca orgánica.          
Fernando González, emprendedor y propietario de 
la marca orgánica.     

Por: Freddy Cardoza     

Hace cinco años Fernando González y Dessiré Flores emigraron de Tegucigalpa, Honduras, y vinieron a Nicaragua con el deseo expreso de alcanzar el éxito en el desarrollo de negocios, iniciando así un proceso de crecimiento a partir de la apertura de la panadería La Casa del Pan, ubicada frente al restaurante La Marseillaise.

Cuando arribaron a nuestro país no conocían absolutamente nada, tan solo el nombre. Sin conocidos y sin conocer la ciudad de Managua, el matrimonio se asentó en la capital con la vista puesta en las oportunidades de negocio que ofrecía Nicaragua.

“Aquí vimos muchas condiciones de seguridad que es muy importante para nosotros los hondureños, además el ofrece mucho potencial para el desarrollo de negocios e iniciamos a desarrollar nuestras ideas que empezamos con la apertura de la panadería”, cuenta Fernando sobre el primer negocio abierto al público.  

Aunque la panadería fue una idea de su esposa, Dessiré, muy pronto tuvieron el apoyo de otros familiares para concretar su puesta en funcionamiento. Pero enseguida vieron la oportunidad de ampliarse hacia el rubro de restaurante y abren Picadelli, un restaurante bufé que ha venido funcionando desde el 2011.

En vista de obtener una excelente aceptación de los clientes, el negocio del restaurante dio paso a la creación de nuevos emprendimientos y surge la empresa de hielo Monte Blanco que, aparte de surtir a la panadería y restaurante, se expandió a proveer de hielo a otros locales dentro de Managua.

Aunado a ello, dada la buena aceptación del restaurante Picadelli no desaprovecharon la oportunidad de ofrecer el servicio de catering, muy demandado en los últimos años tanto por particulares como empresas.          

“Lo del catering se da como por golpe de suerte, porque comenzaron a solicitarnos el servicio”, cuenta González y afirma que “eso nos llevó a invertir en cristalería, mesas, sillas y todo lo relacionado con este nuevo servicio para satisfacción del cliente”.

El descanso no existe para la familia González-Flores, quienes han incursionado en la elaboración de productos cosméticos bajo la marca OrgaNica. En estos cinco años han obtenido un notable éxito en los negocios que emprenden, dando la oportunidad de laborar a más de 15 personas.

“Ha sido un camino un tanto difícil pero satisfactorio”, asegura González, quien apunta que durante este tiempo que han residido en el país no han llegado a sentirse extranjeros. “No conocíamos Nicaragua, no conocíamos a nadie ni teníamos referencias de nada, no conocíamos ni las costumbres ni la comida ni nada. Al principio extrañaba Honduras porque había un factor de comparación, sobre todo en la comida, pero sinceramente no me siento extranjero en Nicaragua y más bien cuando voy a Tegucigalpa siento que voy de visita”, confiesa. 

De la comida a los productos cosméticos    

REUTILIZACIÓN• Fernando González es un emprendedor nato. Graduado de ingeniero industrial, aprovechó los conocimientos en química y producción para darle utilidad a uno de los desechos producidos en la panadería y restaurante.

González refiere que cierta ocasión notó que entre ambos locales comenzó a salir bastante aceite usado, mismo que no encontraban dónde depositarlo para su reciclaje y fue cuando decidió transformarlo en jabones. Esta idea surge a raíz de los antecedentes en saponificación que tenía su familia, pues su abuelo en sus años mozos desarrolló una empresa de jabones en Honduras, que fue cerrada con el correr del tiempo.

“Mi abuelo tenía una pequeña fábrica de jabones y velas, pero había quedado en mí la inquietud de que había pasado con este negocio, fue así que a raíz de los desechos de aceite que salían del restaurante y panadería fue que inicié a elaborar los jabones, primeramente para uso interno, pero luego lo afiné y lo redefiní para usos cosméticos”, refiere González. 

Como ingeniero industrial que es y con los conocimientos básicos de química y producción que tiene empezó a desarrollar fórmulas obtenidas de varios sitios web sobre la base de prueba y error hasta alcanzar un producto orgánico para uso cosmético.

Los resultados de su emprendimiento han sido dos productos bajo la marca OrgaNica, un jabón especial para el lavado del cutis y un aplicador de aceite que elimina manchas de la piel, hidrata y ayuda a combatir el acné a partir de la inclusión en la fórmula de aceite de moringa. “Este jabón está hecho a base de aceite de oliva, aceite de coco, aceite de semilla de uva y el último descubrimiento que yo no sabía que existía y que lo vine a descubrir aquí en Nicaragua es el aceite de moringa y que se produce aquí. Este aceite es lo mejor para productos estéticos, es como el vellocino de oro de la cosmética”, asevera González.

Ambos productos los ofrece al público por encargo y también los puede obtener en panadería La Casa del Pan a un precio de US$10 el conjunto. “Ha tenido una excelente aceptación, porque muchas parejas lo encargan para darlo como recuerdo en sus bodas, los cuales personalizamos según convengan los novios”, apuntó.     

Sobre estos últimos productos, González refirió que están pensando en ampliar el negocio, para lo cual están haciendo los trámites correspondientes con autoridades para obtener los requisitos adecuados y ponerlos a disposición en canales de distribución como supermercados y tiendas de conveniencia.     

Tomado del diario digital, www.elnuevodiario.com.ni , Managua, Nicaragua. 
Sección: Economía. 
Martes 21 de Marzo del 2017.

viernes, 17 de marzo de 2017

Un próspero negocio que empezó con US$100

Las enseñanzas de su madre fueron la clave para que una emprendedora fundara su empresa textil en Masaya.  

Por: Yahany López  

Una mujer que asume retos. Así se define Aída Mayorga, 21 años después de haber emprendido Oscaritex, en Masaya.

El camino para hacer rentable un primer préstamo de cien dólares que recibió de una microfinanciera fue largo, cansado y con frecuentes deseos por desistir, pero encontró en su familia el apoyo suficiente y la inspiración para hacer los mejores bordados infantiles de su ciudad.   

Una máquina de coser prestada por su mamá, la habitación en la casa de sus padres y media docena de pañaleras fue el primer intento que Mayorga hizo para posicionarse en el mercado local.

“No fue fácil. Yo estudiaba y tenía que reinvertir los ingresos que empezaron a generar esas primeras ventas y como mi mamá ya era conocida en el mercado de Masaya, entonces la gente me dio esa oportunidad”, recuerda la emprendedora. 

Ese fue el inicio de una de tres marcas que Mayorga ha registrado. Los bordados infantiles que con años de trabajo en casa fue mejorando Mayorga los llamó Oscaritos, en honor a su primer hijo.

Fueron unos dos años los que la emprendedora estuvo en aquella habitación, para luego pasar a una casa propia donde necesitaba más ayudantes y fue así que surgió la oportunidad para más mano de obra del sector, pero también para que diversificara su línea y confeccionara bajo la marca Alicia, vestidos para niñas.    

Negocio    
Este es el negocio que emplea a 25 personas:
Oscaritex en Masaya.    

Un rótulo       

En 2002, cuando Mayorga ya empleaba cinco personas, decidió poner un rótulo sobre la carretera Masaya-Managua, siendo ese uno de los enganches para que un cliente español les conociera, los visitara y se llevara tres muestras.

“Yo recuerdo que vino ese señor a quien todavía proveemos y nos preguntó si podíamos prepararle un edredón, una pañalera y una almohada. Él iba para Granada y a su retorno pasaría buscando ese producto. Cuando él pasó, ya teníamos listo su encargo y se lo llevó”, manifestó Mayorga. 

negocio    
La mano de obra femenina juega un papel importante
en el giro de negocios de Oscaritex en Masaya.    

Resulta que ese cliente proveía de prendas y confecciones infantiles a tiendas en Puerto Rico, pero el espacio pequeño en el que Mayorga estaba, la falta de condiciones y bajos rendimientos, eran limitantes.

“Entonces al ver esa oportunidad, hablé con mi esposo y aunque no tenía idea de cómo afrontar ese desafío, empezamos a crear esas condiciones. Hice otro préstamo, ahora de mil dólares, con el que se compró máquinas más industriales y mesas de trabajo como el español nos había recomendado. Lo bonito es que él regresó y vio que nos habíamos esforzado en crear una empresa con miras a la exportación”, dijo la emprendedora.    

Esa situación Mayorga la recuerda como uno de los momentos más importantes en la vida de Oscaritex, ya que implicó un antes y un después en sus ventas, pues tuvieron la oportunidad de incrementar en un ciento por ciento sus ventas y duplicar el personal. 

negocio    
Vea el rostro de las personas que hacen posible que
el negocio de Oscaritex siga adelante.       

Hay que certificarse   

Con ese crecimiento era necesario también una serie de certificaciones para que su negocio dejase de ser pequeño y se viera como una planta con mayor seriedad ante los clientes.

“Se invirtió en nuevas condiciones. Se divide la tienda con el área de confección y préstamos, más atención al tema de la iluminación y ventilación para que el personal que estaba en crecimiento gozara de mejores condiciones”, dijo.

Actualmente Oscaritex emplea a 25 personas de forma directa y otras de forma indirecta, pero Mayorga sigue trabajando para crear novedades.    

Negocio      
Las guayaberas son las especialidades que confeccionan
en Oscaritex bajo la marca: Oscaritos.     

Hasta esa etapa del negocio, Mayorga recuerda tantas noches que no pudo dormir y otras tantas cuando solo regresó a casa para alistar a sus hijos, mandarlos a clases y regresar al taller.

“Todo inicio es duro y con el único propósito de cumplir, uno hace muchos sacrificios. Muchas veces tenía que cargar una colchoneta para que mis hijos descansaran mientras terminaba junto con el equipo algún pedido grande. Eso para mí era duro, porque entre mi esposo y yo teníamos que dividirnos muchas tareas como familia”, agrega Mayorga.  

negocio    
 Tres son las marcas que en Oscaritex se ofrecen:
Oscaritos, Alicia y NicaBera.  

Una tercera marca      

Y aunque ese inicio pequeño y duro para la emprendedora implicó sacrificios, sus hijos han crecido y ahora ha lanzado una tercera marca: NicaBera.

“Para ello yo estudié diseño de modas y lo que hemos hecho es crear una línea de guayaberas y ropa tradicional con un estilo más juvenil y más adaptado a las nuevas tendencias femeninas y masculinas”, explica Mayorga.

En conjunto con un socio abrieron una tienda en San Juan del Sur para ofrecer esa línea exclusiva.

Pero la visión de la emprendedora también la ha llevado a crear una línea de bolsos femeninos, cuyos colores realzan la imagen de la mujer que los use.   

negocio   
Preparar a las nuevas generaciones es otra clave en
la que se confía en Oscaritex.    

Con tantos años de experiencia y de ser socia de cámaras empresariales, Mayorga hace un llamado a las autoridades para que impulsen a las pequeñas y medianas empresas.

“La economía de este país descansa en manos de las pequeñas y medianas empresas y es ahí que nos deberían tratar con una corona de privilegios, de tal forma que podamos encontrar apoyo, incentivos y no obstáculos al momento de querer hacer negocios en el país”, declaró.

Y aunque los años pasan y las fuerzas de Mayorga pueden flaquear en algún momento, ella se aferra a la inspiración que tiene en su familia, Dios y sus sueños.   

Contacto     

Oscaritex está ubicada en la ciudad de Masaya. En el kilómetro 28.5 carretera entre Managua y Masaya frente al INSS.  Los números telefónicos son: 2522-6844, 8542-7474 y 8100-4578. Correo electrónico bordadososcarito@gmail.com   


Negocio      
Aída Mayorga, propietaria de Oscaritex en Masaya.   

Tomado del diario digital, www.laprensa.com.ni , Managua, Nicaragua. 
Sección: Economía. 
Viernes 17 de Marzo del 2017. 

martes, 14 de marzo de 2017

Apuestan al turismo y a la apicultura

La variedad de abejas nativas como la chichigua, tamagas y varias especies meliponas, es todo un atractivo turístico para los visitantes de la reserva.      


    
Exponer sobre la variedad de abejas nativas que se encuentran 
en colmenas del Meliponario de la Reserva Estancia del Congo 
es uno de los atractivos para los turistas que visitan el lugar.



 Por: Ramón Villarreal  

La importancia de la apicultura en las reservas silvestres privadas, para garantizar la conservación de los bosques y el interés que despierta entre los visitantes el conocer más sobre estas especies, es la motivación principal del Meliponario Experimental de la Reserva Silvestre Estancia del Congo.

Ramiro Matey Medina ha logrado reunir unas 15 especies de abejas nativas y les brinda atención en el primer Meliponario Experimental de la reserva silvestre Estancia del Congo.

Matey Medina llegó a esta reserva con la modalidad de coemprendedor. “Eso es como ser socio de la reserva, le hice una propuesta a don Freddy Cruz, propietario de la reserva, le pareció buena la idea, nos pusimos de acuerdo y ahí estamos trabajando con diferentes tipos de abejas nativas, en peligro de extinción”, comentó.  

La variedad de abejas nativas como la chichigua, tamagas y varias especies meliponas, es todo un atractivo turístico para los visitantes de la reserva.

“Al turista le gusta venir al Meliponario Experimental, conocer sobre las abejas, todo su trabajo de fabricación de miel, los tipos de abejas que tenemos, la variedad de miel que producen. También les gusta ver todo el proceso en la colmena y tomarse una cucharada de miel, y estamos claros que el turismo de la apicultura es más rentable que vender miel”, indicó Matey Medina.   

Durante el encuentro entre reservas privadas, Freddy Cruz Cortez realizó la presentación de los productos de la Reserva Estancia del Congo, entre ellos miel para aliviar el asma, miel para el colesterol y diferentes usos.

Esta miel siempre está disponible en la Reserva, en envases de 50, 60 y hasta de 400 córdobas, los cuales pueden adquirirse en la misma reserva o en algunas farmacias botánicas.  

Encuentro entre reservas      

Este fin de semana se realizó un encuentro entre varios miembros de la Red de Reservas Silvestres Privadas, en la Reserva Estancia del Congo, ubicada sobre la carretera al balneario El Menco, donde conocieron de la importancia que tiene para las reservas silvestres privadas trabajar en apicultura.  

Los participantes aplaudieron el proyecto y solicitaron asesoría en apicultura para llevar colmenas a sus reservas, mejorar la reforestación, aprovechar la producción de miel y diversificar la oferta turística.

En el encuentro participaron varios propietarios de reservas silvestres privadas, donde ya se ofrece algún tipo de servicio turístico, como hotel, restaurante, senderismo, entre otros y esperan pronto comenzar a trabajar sus proyectos de apicultura.   

Tomado del diario digital, www.laprensa.com.ni , Managua, Nicaragua. 
Sección: Departamentos.
Martes 14 de Marzo del 2017.


lunes, 13 de marzo de 2017

“¡Cometimos tantos errores!”

Esta es la historia de Open English, una plataforma que mueve millones. Lea cómo un joven venezolano ha logrado hacer millones de dólares tras dejar la universidad para dedicarse a emprender su idea de negocio.   

  
 Open English   


Miami/EFE  

Después de enseñar inglés a medio millón de personas a través de la plataforma Open English, el venezolano Andrés Moreno quiere ayudar a que las ideas de los emprendedores latinoamericanos se materialicen en negocios exitosos.

Moreno es una “autoridad” en el mundo del emprendimiento en América Latina, no solo porque con 34 años es casi un “viejo” para los estándares de las startups, sino por su “holding” Open Education, que cuenta con un capital de 120 millones de dólares.  

En una entrevista con Efe, este exitoso empresario radicado en Miami, que cuando le faltaban nueve meses para graduarse como ingeniero dejó la universidad en Venezuela para dedicarse a los negocios, reflexiona acerca de si un emprendedor puede “hacerse”.

“Si bien hay una características personales” que ayudan a ser un emprendedor, el conocimiento, práctico y teórico, así como la metodología, son muy importantes para crear “una empresa exitosa”, dice con convicción.  

NextU, la segunda empresa fundada por Moreno, es una plataforma digital de educación que en este 2017, su tercer año de andadura, va a tener unos 40,000 estudiantes nuevos y ofrece cursos relacionados con las nuevas tecnologías, el sector donde hay más oferta de empleo y puestos mejor remunerados.

“Nos dimos cuenta de que en América Latina había una necesidad muy grande de entrenar a la clase media emergente en las habilidades para conseguir empleo”, señala.

NextU ha puesto en marcha un curso o certificación de emprendimiento dirigido por el propio Moreno y va a lanzar otro de liderazgo a cargo del periodista y escritor de origen cubano Ismael Cala. 

Las estadísticas dicen que en América Latina hay abundancia de personas que quieren poner en marcha su propio negocio, pero el 90 % de esos emprendimientos fracasa en el primer año, señala.

“Hay mucha iniciativa pero algo falla”, porque ni siquiera los que logran salir adelante “llegan a escalar a negocios más grandes”, subraya.

La certificación de NextU busca romper con esa tendencia. NextU cuenta con un equipo académico y asesores, pero no hay ninguna universidad ni ninguna entidad gubernamental detrás del curso. 

Al respecto Moreno indica que la tecnología y la rapidez con la que avanza han dejado atrás a los modelos tradicionales de acreditar el aprendizaje. “Hoy quien valida es el empleador”, subraya.

De ahí que NextU tenga estrechas relaciones con empresas del sector de tecnología, aunque eso no significa que funcione como una bolsa de trabajo, precisa. 

Su historia      


La historia de Moreno es una lección para cualquier emprendedor latinoamericano.

Según cuenta a Efe, su idea original de negocio era llevar profesores estadounidenses a América Latina para enseñar inglés a ejecutivos, pero llegó la era de internet y aquel proyecto derivó en 2007 en una escuela de inglés online con clases en vivo.

La cuna de Open English no fue un garaje sino un “apartamentico” en Caracas. A los cuatro lados de la cama de Moreno había mesas hechas con puertas viejas donde trabajaban arduamente 22 programadores para crear la plataforma.

A los siete meses, Moreno se quedó sin dinero, con solo 700 dólares en el banco, y aunque trató, le fue imposible levantar capital en América Latina.  

Con las millas que le quedaban en una compañía aérea viajó a Silicon Valley (California), donde se alojó durante un año en el estudio de un amigo. Dormía en el sofá y de día se dedicaba a visitar a posibles inversores.

El dinero que conseguía lo enviaba a Caracas a los programadores. En dos años reunió dos millones de dólares, que fue el capital semilla de Open English.

Unos divertidos avisos publicitarios que se pasaban por canales de televisión de varios países latinoamericanos, en los que el propio Moreno actuaba, hicieron que Open English y su fundador y director ejecutivo se hicieran conocidos.

Aun hoy en día más de 50 canales de televisión abierta y de cable pasan los comerciales de Open English, que en 10 años ha enseñado inglés a más de 500,000 personas. 

Los errores    

Actualmente están centrados en abrirse camino en los mercados de Turquía y Rusia y el siguiente paso de Open English es hacer sus primeros cursos para niños, que estarán disponibles este mismo año, en solo “unos meses”. La suya es una historia de éxito, pero Moreno exclama al recordar el pasado: “!Cometimos tantos errores!”.

Cuando se le pregunta por las equivocaciones más comunes del emprendedor latinoamericano la primera que menciona es “nos metemos a copiar ideas de otros”. En lugar de eso hay que entender -dice- “qué es lo que te hace a cada uno una persona distinta y única”.

En su caso, la diferencia era que sus padres eran funcionarios internacionales a los que trasladaban continuamente de destino. Vivió en nueve países y aprendió muchos idiomas, de ahí que escogiera para su primer negocio el aprendizaje de una lengua extranjera.

Otro error frecuente es no conceder la suficiente importancia a la experimentación para crear un producto bueno y contentarse con negocios pequeños, no tener visión para dar el salto a una escala mayor, dice. 

Tomado del diario digital, www.laprensa.com.ni , Managua, Nicaragua. 
Sección: Economía.
Lunes 13 de Marzo del 2017.




viernes, 10 de marzo de 2017

De pensionado a empresario

Coffee Shop Don Federico es un ejemplo de que sí es posible vencer las limitaciones y emprender un negocio exitoso.  


    
Federico de Jesús Rodríguez Vílchez.    


Por: Luis Eduardo Martínez  

Por una incapacidad permanente que ameritó una cirugía en el extranjero, Federico de Jesús Rodríguez Vílchez tuvo que dejar su trabajo de casi cuatro décadas vinculado con la industria del café. Lleva más de dos años como pensionado y, aun en la convalecencia, comparte que se le hacía muy duro quedarse en casa “sin hacer nada”.

Fue entonces que surgió la idea de crear un negocio relacionado con el sector que le apasiona: el café. Antes había emprendido con buen suceso otros negocios y estaba seguro que le iría bien en una nueva aventura, apostando por el turismo creciente en el norte del país, principalmente en el departamento de Matagalpa. 

Rodríguez cuenta que siendo adolescente perdió a sus padres, tuvo que abandonar el tercer año de bachillerato y buscar empleo. Tenía 19 años cuando llegó a trabajar a un beneficio seco de café, donde le encomendaron la tarea de recibir el grano que los productores llevaban de sus fincas para procesarlo.

Sin embargo, era inquieto en sus funciones y aprovechaba ciertos momentos para entrar a las oficinas del beneficio y “aprendí a llevar las estadísticas y nóminas. Un año más tarde me pusieron como una especie de asistente general”.        

Coffee Shop Don Federico, Matagalpa  


 Los ascensos llegaron y en 1984 emigró por la guerra. Al volver era representante de ventas de una empresa que ofrecía maquinarias a los beneficios de café y trabajó además en la administración en algunos de estos centros donde procesan el grano producido en las montañas de Matagalpa y Jinotega.

Durante ese período invirtió en algunas maquinarias de construcción. Esa empresa creció y dos de sus hijos, ingenieros civiles, son quienes quedaron a cargo de la misma.

Rodríguez, quien presidió la Asociación de Beneficiadores de Café en el país, fungía como gerente general de un beneficio cuando en 2014 le detectaron un tumor en el cerebro. Tuvieron que practicarle una cirugía en Colombia y el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social, declarándolo en invalidez permanente, lo pensionó.  

Coffee Shop Don Federico      

“Mi vida ha sido el café, entonces quise hacer un sabor de café con alta calidad de exportación”, relata Rodríguez, indicando que emprendió la venta del grano en paquetes con la marca Don Federico, “pero el mercadeo de la bolsa de café es bien difícil y no me resultaba”.

Rodríguez compró entonces una furgoneta con equipos para preparar bebidas a base de café. La estacionó a la orilla de la Carretera Panamericana, en el kilómetro 101.8, comenzando su nueva aventura frente a un lote de terreno que ya tenía. Un toldo pequeño, una mesa y una docena de sillas de plástico junto al vehículo, atraían a algunos clientes. Las ventas apenas alcanzaban los 600 córdobas por día.  

   


  “Solo vendíamos algunos pancitos integrales, rosquillas de Somoto y las bebidas frías y calientes de café”, recuerda Rodríguez. 

Sin desanimarse Rodríguez y los dos empleados con quienes comenzó el negocio, persistieron y poco a poco la afluencia de visitantes creció igual que la demanda de más servicios, porque “se iba convirtiendo en una parada técnica(…) entonces ya fuimos al banco a buscar un crédito y en julio de 2016 inauguramos Coffee Shop Don Federico”.

La tienda, según el propietario, ofrece “los mejores granos producidos en Nicaragua, café ciento por ciento de exportación y me atrevo a decir que en el país solo dos locales ofrecemos café con esos estándares”.

Además de una amplia variedad de bebidas calientes y frías a base de café, repostería, desayunos, almuerzos, en este negocio también ofrecen “pinolillo con leche con bastante cacao, algo típico que muy pocos lugares ofrecen”, dice Rodríguez. 

La tienda ahora genera ocho puestos de trabajo permanentes, incluyendo a quienes trabajan en la cocina y a quienes se han especializado en barismo. 

Calidez y calidad, parte del éxito     

Rodríguez, quien es catador de café, se encarga de hacer las mezclas del grano que compra a productores que conoció en su antiguo empleo en los beneficios. “Son cafés que superan los 84 puntos en calidad”, afirma.

Para este empresario, la calidad de los productos y la calidez en la atención forman parte del éxito de Coffee Shop Don Federico, “con un personal que atienda con una sonrisa y amabilidad al visitante”.

   


 También destaca su presencia permanente en el local para asegurarse de que todo marcha conforme esas normas que incluyen además precios justos.

“A pesar de que nuestros productos, el café, carnes y otros son de alta calidad de exportación, tenemos precios más favorables que otros restaurantes”, señala Rodríguez.

Agrega que el crecimiento del turismo en el norte del país genera oportunidades para el emprendimiento y “en esta zona de Sébaco hay bastantes negocios nuevos, pero hay que explotar más esa cantera, es tirarse sin paracaídas, aventurarnos, abrir las puertas y atender a los turistas que están llegando”.

 Contacto    

Coffee Shop Don Federico está ubicado en el kilómetro 101.8 de la Carretera Panamericana Norte, a dos kilómetros de la ciudad de Sébaco con dirección a Ciudad Darío.   

Tomado del diario digital, www.laprensa.com.ni , Managua, Nicaragua. 
Sección: Economía. 
Viernes 10 de Marzo del 2017.



Anxo Pérez, un orador en guerra contra el desaprovechamiento del tiempo

El traductor español Anxo Pérez busca conquistar Latinoamérica con su libro La inteligencia del éxito con 88 claves de lecturas con metáforas.   


El escritor español Anxo Pérez también es autor del libro Los 88 peldaños del éxito, con más de 100,000 ejemplares vendidos. LAPRENSA/EFE     
El escritor español Anxo Pérez también es autor del libro Los 88 peldaños del éxito,
con más de 100,000 ejemplares vendidos.   


Agencia EFE    

 El talentoso emprendedor español Anxo Pérez ha roto todos los moldes y, con un currículo envidiable, este orador en guerra contra el desaprovechamiento del tiempo acaba de presentar en Buenos Aires su último libro La inteligencia del éxito, con el que espera conquistar a los lectores latinoamericanos.

En un mundo en el que solo dos por ciento de las personas aprovecha su inteligencia, Pérez explicó en una entrevista con Efe que se invierte “menos de lo que debiéramos en desarrollo personal y autoconocimiento”, dos de las piedras filosofales de su trayectoria.


La inteligencia del éxito, propone 88 peldaños de ágil lectura y fácil desempeño con los que anima a la gente a tomar impulso, transformar aquellos aspectos de la vida que no les gustan y gestionar mejor sus prioridades.  

“En la medida en que mejores tu toma de decisiones estarás mejorando tu inteligencia del éxito”, agregó Pérez, quien se enorgullece de ser “coherente” en su vida con lo que recomienda a otros y que, para él, es la clave de la fama de sus ponencias.

Para el escritor, “el libro genera una especie de apego grande” que vuelve a la gente “muy fanática” de cada consejo.

“Es bonito para mí ver que en este lado del charco también tiene esa buena acogida”, señaló este polifacético autor cuyo objetivo es “que no seas el mismo después de leer el libro”.  


Los 88 peldaños del éxito       

Y es que Pérez ya está acostumbrado a situar sus títulos en los primeros puestos de las listas de ventas.

Con su primer libro Los 88 peldaños del éxito, logró vender más de 100,000 ejemplares.

La inteligencia del éxito consiguió superar su propio récord y, en solo dos meses en el mercado, ya se ha posicionado entre los libros más demandados de España y ha superado en ventas a su ópera prima. 

Un manual con metáforas    

Este manual describe con pelos y señales la receta de su éxito a través de pequeñas metáforas.

Símiles que repasan episodios concretos de la vida de este emprendedor que, con sus aciertos y errores, no tiene ningún miedo a atreverse.

Una auténtica invitación a ser proactivos para lograr pintar de colores el cuadro blanco y negro con el que define la vida y que únicamente se logra haciendo que las cosas sucedan.  

La “curiosidad”, “atreverse en la vida” y “decir si cuando muchas veces la gente dice no”, “saber gestionar las relaciones personales” de forma altruista y genuina o invertir en conocimiento sin escatimar, son algunas de las peculiaridades que tienen esos “inconformistas” tocados por la varita del éxito que pueblan el planeta.

Una notoriedad que, además, para Pérez solo se logra con “esfuerzo”.

Este escritor también se sitúa como un emprendedor inconformista, y cree ciegamente que “ningún soñador debería renunciar a ninguno de sus sueños” y que pese a su brillante currículo se define como “un humilde aprendiz al que le queda mucho por aprender”.    

Traductor de Obama    

El escritor español Anxo Pérez, tiene cinco titulaciones universitarias, habla nueve idiomas y toca otros tanto instrumentos musicales. Además. fue intérprete para el FBI y traductor simultáneo del expresidente estadounidense Barack Obama (2009-2017).

Pero sin duda, de lo que más orgulloso está este joven de mente insaciable es de haber creado un novedoso método con el que aprender idiomas como el chino en ocho meses.

8belts.com es el nombre de un emprendimiento revolucionario que, mediante un "ranking matemático" que analiza con que frecuencia se utiliza una palabra y su grado de combinabilidad con otras, crea una "jerarquización del idioma pieza a pieza".  

"Esto era algo que no se había hecho nunca y el resultado fue una bomba. Una revolución", explicó el creador de esta empresa que crece 400 por ciento al año y ha pasado de uno a cien empleados en muy poco tiempo.  

Tomado del diario digital, www.laprensa.com.ni , Managua, Nicaragua.  
Sección: Cultura.
Viernes 10 de Marzo del 2017.   
 


viernes, 3 de marzo de 2017

Se arriesgó y entre las hojas de tabaco conquistó el éxito

Esta es la historia de un emprendedor que decidió abrirse mercado donde parecía difícil triunfar. Renunció a su empleo y ahora es un prometedor empresario.  


       


Wendy Alvarez Hidalgo  

Su afición por los puros —que luego se convertiría en su proyecto de vida— comenzó siendo muy joven. Su abuela guardaba uno, que cierto día despertó su curiosidad y se lo fumó. Si bien el primer contacto de Israel Yunbank con el tabaco provocó una reacción de rechazo que lo llevó a prometer que nunca más volvería a fumarlo, estando en la universidad nuevamente se aventuró y desde entonces se convirtieron en un deleite, en ese momento difícil de complacer.

A pesar que Israel estaba consciente de que Nicaragua era cuna de los mejores puros que se consumen a nivel mundial, también sabía que eran pocos los nicaragüenses que, hace casi una década, tenían el privilegio de probar el buen sabor del tabaco nica, debido a que las compañías productoras —dada a su condición fiscal— solo estaban enfocadas en los mercados internacionales.  

   


 En aquel tiempo la única opción que tenían los nicaragüenses para adquirir un puro, según Israel, era comprándolo en el mercado Roberto Huembes, en su mayoría de muy baja calidad. “Tuve la ventaja de que me tocaba viajar un poco a Estelí, donde conseguía puros que mis amigos me regalaban. Nunca entendí por qué viviendo en un país productor de tabaco de alta calidad, no tenía opción para comprarlo y tenía que contactar a mis amigos para eso”, afirma sentado en un acogedor sofá, en un local cerca del centro de Managua.      

Fue así como nació su idea de abrir en Managua una tienda para vender tabaco nicaragüense de alta calidad. Ya llevaba diez años siendo un aficionado del puro y las tabacaleras comenzaban a abrirse al mercado interno.  

   


Echar a andar la idea de negocio no fue tan fácil, sobre todo porque estaba trabajando en una compañía donde le iba bastante bien. Además sabía que debía cumplir las exigentes regulaciones para este tipo de negocio. De lo que sí estaba claro este, ahora empresario, es que no quería ser empleado toda su vida, debía hacer algo distinto que le permitiera la independencia económica, que le asegurara un mejor futuro a su familia.

Fue así cuando tras pensarla muy bien, hace nueve años, sin renunciar a su empleo, decidió rentar una camioneta y se enrumbó al norte del país. “Decidí tomar el riesgo”, afirma.  

   


 Llegó a Condega y le propuso a un pequeño productor de tabaco —a quien meses atrás había conocido— a aventurarse con su idea de negocio. Llenó la camioneta de puros de muy buena calidad elaborados por este productor, que no operaba bajo el régimen de zona franca. “Los puros tenían buen sabor, pero la construcción de estos no era tan buena, sin embargo se podían vender a precios razonables”, relata.      

     



Comenzó desde abajo         

A su regreso a Managua rentó un local en Los Robles, que era tan pequeño que, por ejemplo, equivalía a un espacio de parqueo para un vehículo. Todos los días, después de concluir su jornada de trabajo, se iba a abrir su local y procuraba vender rápido su inventario para ir ahorrando un buen capital para comprar, para luego tocar las puertas de las tabacaleras de renombre y convencerlos de que su tienda en Managua podía ser una buena opción para llegar a un mercado de consumidores de puros a nivel local que estaba en crecimiento.

Sus amigos fueron los primeros clientes, ellos se encargaron de dar a conocer la calidad de los puros que se vendían en su tienda llamada Nostalgia de Nicaragua. También las redes sociales han sido aliadas del crecimiento de este negocio, que se ha tenido que reinventar constantemente, para no morir en el camino tal como le ha ocurrido a otras que también han querido imitar la idea de este emprendedor. 

    



El negocio comenzó a crecer y demandaba más tiempo de Israel, cuatro años después, renunció a su empleo y decidió invertir toda su liquidación en la tienda. Este empresario sabía que no podía quedarse solo vendiendo tabaco, los clientes exigían más que eso. Por eso, optó por mudarse hasta Carretera Sur, una zona que estaba en crecimiento y por donde circulaban potenciales consumidores.

Y es que además de venta de puros, los aficionados a este producto querían espacios para degustarlos y a la vez otro tipo de servicios. A Israel le gustaba un local que estaba por la zona de Carretera a Masaya y siempre que pasaba por el sitio se visionaba en ese lugar, pero la oportunidad aún no llegaba.

   



El rápido crecimiento comercial, en Carretera Sur, se “tragó” la tienda por lo que debió irse de ahí. Se trasladó a Granada, atraído por la llegada de turistas, sin embargo como la mayoría eran los conocidos como “mochileros” y ellos no gastan en puros posteriormente la cerró.

Se trasladó a San Juan del Sur, otro polo de atracción turística y si bien todo parecía funcionar bastante bien, el hecho de manejar un negocio a la distancia ya era un factor de desventaja.  

Por eso, cuando apareció la oportunidad de trasladarse a un local en Carretera a Masaya la tomó y es ahí donde desde hace cinco años echó raíces tras tener pérdidas económicas.  

   



Ha pensado desistir     

Tal ha sido el crecimiento de su negocio, que en un principio solo vendía una variedad de puro y ahora ofrece entre veinte y treinta. Su repertorio de clientes pasó de cincuenta a más de cuatrocientos.

Pero mantener a flote el negocio no sigue siendo fácil. Israel admite que pese a que ya está siendo autosostenible, hay momentos que se le cruza por la mente renunciar al mismo, principalmente cuando los ingresos no dan para cubrir los gastos administrativos. “Recuerdo que cuando vendía mil pesos al inicio me alegraba, y ahora si no vendo tal cantidad me pongo a llorar porque no pagué la luz”, afirma entre risas, al tiempo que añade: “El crecimiento tiene un costo proporcional alto, tenés que estar innovando todo el tiempo”. 

A su tienda han llegado aficionados de todas partes del mundo y el crecimiento del consumo de puros a nivel local ha sido tal que antes el ochenta por ciento de sus clientes eran nicaragüenses y el resto extranjeros, relación numérica que ahora se ha invertido.

El local tiene capacidad de albergar a 25 aficionados sentados, pero cuando se organizan conciertos pueden asistir más de doscientas personas. En el sitio hay 120 metros cuadrados de lounge.

Cuando Israel repasa el largo camino que ha recorrido para llegar al éxito, solo recuerda lo que una vez le dijo un profesor en la universidad: “Los emprendedores son tomadores de riesgos”. Y él se arriesgó y ganó. 

Contacto 

Propietario: Israel Yubank. 
Dirección: Semáforos de Pharaohs Casino,
50 metros al sur, contiguo al Hotel Ambassador.

Teléfono: 2270-1450  

E-mail: nostalgiacigars@hotmail.com    


Tomado del diario digital, www.laprensa.com.ni , Managua, Nicaragua.
Sección: Economía.
Viernes 03 de Marzo del 2017.